Habrías preferido lágrimas y violeta.
Pero todo se acaba ya,
Sólo nos quedan unos últimos segundos grises
Y apuraré el sorbo de café.
Habías esperado promesas rotas
Y más mentiras que no te duele escuchar.
¿Ha sido decepcionante una tarde lluviosa
a través de un cristal?
Pero en ti ya no hay
Azul, ya no se escucha
El rumor de la radio,
Desapareció el rastro del tiempo en tu rostro
Y ya no conozco tu cuerpo lunar.
Tus pechos redondos y escondidos,
Tu cuello ondulado y
Tu ombligo como la huella de mis dedos.
Tal vez los hombres hayan descubierto la cara oculta
Del satélite.
Tal vez eso lo haga dejar de girar alrededor de mí.
Dime, ¿qué hay más que eso?
Ni lágrimas
Ni violeta
Ni mentiras ni promesas
Alcanzan la vasta duda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario