miércoles, 22 de julio de 2009

EL AMIGO

Llora cuanto quieras
sobre mi hombro,
desahógate,
cuenta conmigo
para lo que te haga falta.


Pero no te equivoques,
no soy mejor que ella.


Le envidio
cada una
de tus lágrimas...

Karmelo C. Iribarren
Efectos secundarios

1 comentario:

Catrina dijo...

Pues yo no